¿Garantizaría, según Nietzsche, la ciencia la verdad?

¿Garantizaría la ciencia la verdad?

Coordinador: Mario Sáez Plaza

Autores: Alejandro,Omar, Fran, Rubén, Samuel, Chaymae, Mario e Iván.RÚBRICA PARA DOCUMENTO DE POSICIÓN PARA DEBATE AGFIDE

Para comenzar, gracias a la ciencia propiamente dicha podemos comprender muchos de los fenómenos naturales que suceden a nuestro alrededor, y los cambios que tienen lugar en nuestro tiempo. Las teorías y modelos cinéticos -como la evolución de las especies, el átomo, la célula, el Big Bang- nos permiten conocer el universo. Las grandes teorías científicas actúan como punto de referencia para muchos de los planteamientos filosóficos que rigen el mundo moderno e influyen en la opinión de la sociedad. Pero, ¿garantiza ésta la verdad?

Desde la perspectiva de la muerte de Dios, la supuesta objetividad que permite que la ciencia sea viable y legítima no existe. Existe tan sólo una “subjetividad objetiva”, es decir, que lo que percibimos es lo real. La ciencia trata de imponer unas verdades supuestamente  objetivas, las vivamos o no, y eso, para Nietzsche, sería imponer un Dios eterno como espejo de una realidad en constante devenir. No sería legítimo para él, y por lo tanto, se posicionaría en contra. Las leyes que un científico escribe tan sólo son invenciones humanas. Además, la razón no se puede justificar a sí misma, ¿por qué deberíamos creer en la razón? Sin embargo, sí que podemos creer en lo perceptible. La razón humana podría desaparecer, y el mundo continuaría su curso. Sin embargo, lo perceptible no puede desaparecer sin llevarse a la razón humana consigo.

Desde la crítica a Sócrates,Nietzsche estaría en contra debido a que las matemáticas para él no son una forma correcta de entender el mundo, ya que no describen nada real sino solamente invenciones. No obstante, la ciencia nos permite tener un mayor control de la realidad, la previsión del mundo natural, pero eso no quiere decir que garantice la verdad y también sirve para ocultar un aspecto de la naturaleza que sólo los fuertes consiguen aceptar: el caos, es decir, la ciencia sirve tan sólo para racionalizar ese caos y apaciguarlo a imagen de la razón, pero sin hacer verdadera justicia al caos.